Se ha hecho público recientemente que el gobierno mexicano ha destinado tropas del ejército desde otoño en varias áreas conflictivas en respuesta al aumento del vandalismo y los robos en las líneas ferroviarias y en el transporte de automóviles.
“El ejército mexicano está proporcionando protección a corto plazo a la industria del automóvil en el estado de Guanajuato”, confirmó un portavoz de Kansas City Southern Railway Company (KCS) a Automotive Logistics, sin entrar en más detalles.
La empresa ferroviaria Ferromex no ha querido comentar sobre el asunto.
Múltiples fuentes sugieren que se han empleado hasta 1.000 efectivos en varios puntos conflictivos del país, incluidos Guanajuato y otras partes de la región central de Bajío.
En diciembre de 2015, el sitio web El Economista informó que los ladrones estaban abordando los trenes que transportan vehículos terminados, los detenían o ralentizaban en un tramo entre Irapuato y Celaya y robaban los neumáticos, baterías y otros componentes.
El sitio web citaba al director ejecutivo de producción de Mazda en México, Keishi Egawa, quien reconocía que los robos comenzaron cuando la empresa inició sus operaciones en la nueva planta de Salamanca en 2014 y que sucedían dos veces por semana contra piezas de Mazda y otros vehículos terminados.
General Motors también registró un aumento de los daños y el vandalismo en vehículos transportados por ferrocarril hacia el norte.
“Los daños aumentan, principalmente en el noroeste del país", comentó Alfonso Rodríguez, director de operaciones en Norteamérica y logística intercontinental de vehículos de GM, a principios de año en la cumbre de Importación y Exportación Logística de Vehículos Terminados en Baltimore.
“Tenemos en cuenta estas tasas de daños a la hora de tomar decisiones sobre el uso del ferrocarril o las líneas de cabotaje", comentó.
La cuestión de los daños y el vandalismo en vehículos ha sido tan notable que los directivos de las marcas recientemente enviaron una carta solicitando ayuda al presidente del país, Enrique Peña Nieto.
“El resultado ha sido fenomenal, con una drástica reducción de los incidentes", comentó Chuck Kendig, vicepresidente asistente de producción, planificación de ventas y logística de American Honda.
En conversaciones recientes con Automotive Logistics, Kendig alabó los esfuerzos de los ferrocarriles mexicanos por mejorar los servicios y la calidad. Destacó los robustos sistemas de seguridad de Kansas City Southern de México (KCSM), y también elogió a Ferromex (FXE) por sus notables mejoras.
“A pesar de haber recibido recientemente la ayuda del ejército, no debemos subestimar el nivel de compromiso mostrado por FXE en esta causa, simplemente excepcional", comentó.
Uno de los puntos candentes es Celaya, donde Honda cuenta con una gran planta de automóviles. Celaya es un punto de intercambio entre KCSM y FXE, los trenes deben reducir la marcha notablemente al pasar cerca del centro de la ciudad, lo que ofrece una buena oportunidad a aquellos que intentan actos de vandalismo o robos.
Un desvío en la ruta permitiría a las ferroviarias mexicanas FXE y KSCM evitar la ciudad, pero lleva años de retraso y ha agotado sus fondos. Debería estar terminada en 2013, antes de que se inaugurara la planta de Honda. Pero las disputas por terrenos y las dificultades de financiación, incluida una reducción del presupuesto federal, han retrasado su implementación. El ministerio mexicano de transporte ha indicado que este proyecto es prioritario, sin embargo, considera que estará listo a finales de 2017.
“No estamos al tanto de estas negociaciones, pero estamos seguros que todas las partes están estableciendo el marco adecuado para completar el desvío de Celaya y el acceso dual a la planta de Honda para finales de 2017”, comentó Kendig.
El compromiso del gobierno mexicano y la reanudación de los intercambiadores hacen que Kendig sea optimista sobre la mejora ferroviaria. “Vemos la luz al final del túnel”, comentó.
Las elevadas tasas de daños en determinadas rutas en México han llevado anteriormente a Audi en México a considerar rutas y modos de transporte alternativos, como el cabotaje en la costa occidental. Además de las exportaciones a Asia, Audi querría comenzar a utilizar el puerto de Lázaro Cárdenas para exportar vehículos a la costa oeste de EEUU y Canadá, destinos que hasta el momento se han cubierto por ferrocarril desde México.
“Creemos que tendremos que analizar estas opciones y estamos negociando con Volkswagen de México y grupos logísticos de Alemania”, comentó el director de logística de Audi México, Peter Koltai, a Automotive Logistics a principios de año. “Creemos que nos ayudaría con los problemas de capacidad o el vandalismo en los trenes destinados a EEUU desde el centro y el norte de México”.
Fuente: automotivelogistics.media